Nuestra historia enológica se remonta a generaciones atrás, cuando nuestros antepasados comenzaron a cultivar las uvas en la fértil tierra de Ribera del Duero. Con un compromiso inquebrantable con la calidad y la tradición, hemos continuado esta legendaria herencia vitivinícola. Jeita es el resultado de años de pasión y dedicación a la vinificación. Cada botella es el fruto de una cuidadosa selección de uvas de la más alta calidad y una maduración paciente de 36 meses. Para lograr darle el sabor y la calidad que nos diferencía, utilizamos barricas de roble francés y americano. Nuestro vino es un testimonio de la excelencia enológica que ha sido una constante a lo largo de los años en esta región. Te invitamos a saborear la historia y el sabor que Jeita tiene para ofrecer.